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Mecánica básica de motos: ¿qué es qué en una moto?

6 minutos

Saber cómo poner en marcha tu moto o scooter resulta tan fácil como girar una llave o apretar un botón, pero conocer cómo y por qué funciona o qué componentes lo hacen posible, es algo bastante distinto.

Moto deportiva negra
Mecánica básica de motos: ¿qué es qué en una moto?

Si estás aquí es porque quieres conocer el funcionamiento de tu motocicleta y que, además, sea una explicación clara, sencilla y a poder ser fácil. Este será tu post favorito de mecánica básica para principiantes.

Independientemente del tipo de motor que impulse tu motocicleta o scooter, ya sea eléctrico o de combustión interna, tu vehículo se compone de unas partes básicas comunes a la inmensa mayoría de modelos que está bien que conozcas, sin que por ello debas convertirte en un experto mecánico. Saber para qué sirve cada componente de tu moto no solo te dará un mejor conocimiento, sino que también te permitirá detectar fallos o posibles averías. Puede que te pierdas cuando lees la ficha técnica de tu moto, pero explicar con cierto detalle cada apartado hará que veas todo mucho más claro la próxima vez que te enfrentes a una.


Suspensión trasera de moto


Cadena y transmisión


MOTOR-HONDA-DE-CUATRO-CILINDROS


sección de motor con válvulas neumáticas


Tubos de escape


Tanto los fabricantes como la prensa especializada dividen a menudo el esquema general de una moto en sus informaciones técnicas entre “motor” y “parte ciclo”. La parte motriz, como no te habrá costado intuir, es la referente al motor, la caja de cambios y la transmisión. El primero se encarga de producir, mediante combustión interna de oxigeno y combustible, la energía necesaria para producir el movimiento del vehículo. El segundo determina el modo de funcionamiento según las condiciones de dicho movimiento, y el tercero transmite la energía a la rueda trasera. Actualmente, la mayoría de la industria de la motocicleta produce motores con ciclo de “cuatro tiempos”, en detrimento de los casi desaparecidos motores de “dos tiempos”, más simples y enérgicos, pero potencialmente más contaminantes y menos prácticos.

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By UtzOnBike (3D-model & animation: Autodesk Inventor) – Own work, CC BY-SA 3.0, Link

Resumiendo muy brevemente el funcionamiento y las partes que provocan el movimiento de tu motocicleta sería el siguiente: motor – embrague – caja de cambios – diferencial – ruedas.

Sobre el motor

Algo básico y que no está de más que conozcas es que existen dos tipos de motores: los motores de combustión y los motores de explosión. La diferencia entre estos reside en su fuente de alimentación, en definitiva, el tipo de combustible que consumen. Los motores de combustión son aquellos que funcionan gracias a la labor del diésel. Mientras que los motores de explosión son los que necesitan gasolina para su funcionamiento.
Mientras que un motor diésel provoca un ‘mix’ de aire y gasóleo hasta que prende aprovechando la energía que genera el movimiento en los pistones, un motor de gasolina comprime aire y gasolina, utilizando chispas que producen las bujías para que la mezcla explote, utilizando esa energía para estimular y mover los pistones.

Tu motor de cuatro tiempos puede estar refrigerado por agua, por aire, o por aire y aceite, dependiendo de su diseño. El sistema de refrigeración se encarga de controlar la temperatura de funcionamiento. El motor utiliza un sistema de distribución -situado en su parte más alta-, en el que un árbol de levas se encarga de abrir y cerrar distintas válvulas para la admisión de oxígeno y combustible en la cámara de combustión -los cilindros-, así como de la evacuación de gases hacia el tubo de escape. Si tu motor utiliza un sistema automático en la caja de cambios, ya sea por correa dentada o engranajes, todo es cuestión de acelerar y frenar. Las cajas de cambios manuales ofrecen la posibilidad de elegir el conductor la relación idónea a emplear, dependiendo de las circunstancias de la conducción y apoyándose en el embrague previamente para engranar cada relación. Por último, la transmisión secundaria, la que se encarga de transmitir la tracción a la rueda trasera, puede emplear sistemas de cadena, correa dentada o cardán. Hasta aquí lo referente a la parte motriz.

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By A7N8X – Own work, CC BY-SA 4.0, Link

La parte ciclo de tu moto está compuesta principalmente por el chasis, cuya misión es la de ejercer de estructura principal para soportar el motor y resto de componentes. También cumple la función de ser punto de anclaje para las suspensiones delantera y trasera. La primera está formada por la tradicional horquilla telescópica, sistema universalizado prácticamente en la industria.

Los scooters de menor cilindrada pueden recurrir a un sistema de monoamortiguador, caso de la Vespa, por ejemplo. Los sistemas de suspensión posterior pueden emplear el clásico esquema de dos amortiguadores –uno a cada lado de la rueda-, o de un solo amortiguador, ya sea de ubicación central por delante de la propia rueda, o en un lateral de esta. Las suspensiones cumplen la inestimable función de amortiguar el impacto del vehículo sobre la superficie que transita. Si no contases con ellas, la carga lumbar sería simplemente inaceptable, algo así como la sensación constante de que se te caen los empastes.

Sobre los frenos

Los frenos son el otro gran apartado de la parte ciclo, cuya importancia seguramente te sea fácil imaginar. Atrás quedaron los sistemas de tambor de accionamiento mecánico, aún presentes en algunos modelos de scooter. De forma más sofisticada, los conjuntos de discos y pinzas de freno de accionamiento hidráulico han tomado literalmente el mercado, gracias a su efectividad y sencillez de uso. Los sistemas antibloqueo aseguran una frenada firme con menos riesgos; toda una ayuda a la conducción, sobre todo para los inexpertos.

De todas maneras pese a que los frenos de disco se hayan asentado en el mundo del motociclismo y afianzado en el mercado, debes conocer todos los tipos de frenos que existen. Para ello te recomendamos pasarte por este post, donde te explicamos uno a uno su historia y evolución. Desde el uso de las plantas de los pies para frenar los primeros velocípedos a los frenos de disco de carbono que utilizan nuestras motocicletas de competición.

Finalmente, sistemas como el de instrumentación se encargan de transmitir la información necesaria sobre el estado de la marcha –velocidad, revoluciones del motor, temperatura de éste, marcha engranada, e información adicional como la carga de la batería, distancia parcial y total recorrida por el vehículo, entre otros datos-.

Ahora ya tienes los conceptos más básicos pero a su vez más fundamentales que te ayudarán a comprender el funcionamiento de aquellas partes que componen y mueven tu motocicleta. Conocer tu motocicleta y las partes que la componen te ayudará también para evitar futuras averías.

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