De leyenda

Mundial de Rallys 1995: un año apasionante para Carlos Sainz

9 minutos 26/02/2021 Última actualización: 18/04/2024

Tras el intenso duelo de la temporada anterior con su compañero de equipo, 1995 prometía ser un año épico. El Subaru Impreza había demostrado ser un coche campeón y prometía ser el vehículo a batir, más en manos de dos de los mejores pilotos del momento, Carlos Sainz y Colin McRae.

Coche de Carlos Sainz en el Mndial de Rallys 1995
Mundial de Rallys 1995: un año apasionante para Carlos Sainz

Arrancaba la temporada del Mundial de Rallys de 1995 con una serie de cambios en la reglamentación que obligaron a todos los equipos a instalar restricciones en la admisión del motor y rebajar la potencia de los coches. Asimismo, estas limitaciones también afectaron a los neumáticos y a las asistencias. Con estos cambios y la incertidumbre de qué coche sería el más fuerte en estas circunstancias, arrancó un Mundial que consistió en 8 pruebas, todas ellas puntuables y con un muy pequeño margen para cometer cualquier error y poder seguir optando al título Mundial.

Rally de Montecarlo

La primera de las pruebas se celebró en Montecarlo. La afamada prueba monegasca prometía como siempre un espectáculo de asfalto traicionero, con zonas de gran dificultad y placas de hielo que eran más peligrosas en las rondas nocturnas. Casi todos los pilotos arrancaron fuerte, aunque provocados por una climatología caprichosa y la dificultad de seleccionar los neumáticos más adecuados para cada situación, varios pilotos fueron cayendo como fruta madura.

El compañero de equipo de Carlos Sáinz, Colin McRae, sufrió una salida de pista que, a las primeras de cambio, lo excluyeron de la prueba. El piloto madrileño también se vio afectado por los mismos problemas que el resto de rivales, aunque logró superarlos. La situación más curiosa que vivió Carlos Sainz en Mónaco fue en el tramo nocturno que les llevó al Col de Turini, donde se les cruzó un gato negro y todo el sistema eléctrico falló. Tras unos segundos de crisis e incertidumbre, el coche volvió a arrancar y el Subaru pudo terminar el tramo con Luis Moya leyendo las notas sin luz interna. Gracias a ello, Carlos se hacía con el control de la prueba con 7 victorias de tramo, liderato que mantuvo hasta la gran victoria final en la capital monegasca por delante de François Delecour y Juha Kankkunen.

Rally de Suecia

La segunda prueba del Mundial de Rallys les llevó a Suecia, un Rally nuevo para la pareja Sainz-Moya, que prometía una complejidad sin igual en sus pistas de nieve y hielo. Ni el no conocer las pistas ni la prueba fue freno para que Carlos Sainz marcara los mejores tiempos en cada tramo. El coche del español volaba y parecía el favorito a ganar la prueba, pero una bajada de temperatura radical hizo que los Impreza comenzaran a tener fallos mecánicos y los coches rompieron el motor. Con 0 puntos en el bolsillo, pero la moral alta tras ver los tiempos que se habían logrado, el equipo puso la mirada en la siguiente prueba del Mundial.

Rally de Portugal

El Rally de Portugal fue, kilómetro a kilómetro, una batalla constante entre Carlos Sainz y Juha Kankkunen. Las complicadas pistas de tierra y gravilla lusas presentaban tramos con barro que hicieron que la elección de neumáticos fuera determinante para ser competitivo.

El piloto madrileño eligió bien y, aunque no fue suficiente para luchar por la victoria, tuvo que tirar de sus prodigiosas manos y de su gran conducción para poder superar la superior potencia de los Toyota frente a los Subaru. La primera jornada finalizó con Carlos en lo alto de la tabla, con cuatro victorias de tramo de un total de 11 disputadas. La segunda, sin embargo, se complicó, puesto que el piloto finés restaba segundos a Carlos tramo a tramo. Juha Kankkunen volaba, llegó a sacarle al finalizar el día 22 segundos, y la pelea por la victoria se mantenía en un puño. Sainz se mostraba preocupado por la sangría de segundos, pero decidía arriesgar el último día.

La proverbial aparición de la lluvia, y en consecuencia el barro, hizo que el tramo transcurriera por un terreno más resbaladizo, y la ventaja de los Toyota se esfumó. Sainz aprovechó esta circunstancia para, poco a poco, ir recortando tiempo y superar en la clasificación al finés en el tramo 31. En el último y definitivo tramo, en el que Sainz arrancó como líder de la prueba, una piedra rompió un latiguillo de frenos a los dos kilómetros de tomar la salida y el coche se quedó con el freno del tren trasero. Parecía que la mala suerte volvía a cebarse con Carlos, pero tirando de experiencia y de pericia, se hizo con la victoria por una exigua diferencia de 12 segundos sobre Juha Kankkunen. Al piloto del equipo Toyota le pudo la presión.

https://www.youtube.com/watch?v=FTfl71biZhU

Tour de Corse

Y el Mundial llegó al Tour de Corse o Rally de Francia, un rally de asfalto donde la potencia era clave para afrontar con garantías todos los tramos. De nuevo, los Impreza sufrían en rendimiento frente a los Toyota, lo que añadido a una avería en el diferencial central del coche de Sainz le obligaron a una lucha de supervivencia por no perder demasiados puntos. Sin ganar ningún tramo, Carlos lograba acabar el rally en una meritoria cuarta posición a un minuto y dieciocho segundos del ganador de la prueba, el francés de Toyota Didier Auriol. Segundo fue François Delecour con en el Ford Escort RS y Andrea Aghini con el Mitsubishi Lancer EVO III.

Rally de Nueva Zelanda

Poco se puede decir de la cuarta prueba puntuable del Mundial de Rallys, puesto que tras sufrir un accidente en bicicleta de montaña Carlos Sainz y no recuperarse a tiempo de su hombro dañado, no pudo participar en el Rally de Nueva Zelanda. No pudo estar en una prueba que ganó su máximo rival y compañero del equipo Subaru Repsol en el Mundial, Colin McRae. Lideró más de la mitad del rally en una lucha sin cuartel contra los tres Toyota de Auriol, Kankkunen y Schwarz.

https://www.youtube.com/watch?v=hFbPmuWafmA

Rally de Australia

En el Rally de Australia la suerte le volvió a ser esquiva al español. Aún convaleciente de su lesión de hombro, Carlos Sainz trató de darlo todo, pero una rotura del radiador en el tramo 10 le obligó a abandonar la prueba. El Subaru de Peter Bournse sufrió también un percance y tuvo que abandonaba la prueba australiana. La única nota positiva de este rally para el equipo fue la segunda posición de McRae, que llegó a rodar líder durante algunos tramos.

https://www.youtube.com/watch?v=uO2oJdBShB0

Rally de Cataluña

A falta de dos pruebas, y con el Mundial todavía muy abierto, tocaba competir en el Rally de Cataluña, una prueba de máxima dificultad llena de curvas en carreteras de montaña. McRae llegaba con 55 puntos sobre los 50 que llevaba Sainz. Tramo a tramo, el rally alternaba de líder. Ahora Sainz, ahora McRae, los dos pilotos de Subaru Repsol luchaban codo a codo y, a pesar de tener problemas con los neumáticos “El Matador” lograba superar a su compañero de equipo en 4 tramos el primer día.

El segundo arrancó con dominio de Kankkunen y aupándose al liderato hasta el tramo 16, en el que un error le llevó a destrozar su Toyota y le impidió continuar en la prueba. Con la pista libre, todo apuntaba a la victoria de Carlos y un segundo puesto de McRae sobre todo cuando desde el equipo, para salvaguardar el Campeonato de Constructores, se dieron instrucciones expresas para que así fuera. No demasiado contento con la decisión Colin McRae, que siguió presionando y llegó a colocarse líder de la prueba, aunque tras discutir públicamente de manera bochornosa, el equipo obligó al británico a ceder su puesto y para ello penalizó intencionadamente al entregar la documentación del tramo. Eso hizo que la victoria cayera del lado de Carlos Sainz.

Si esto fuera poco, los comisarios descubrieron que los Toyota oficiales llevaban una modificación no permitida que les dio potencia extra durante todo el año y fueron excluidos del Mundial. Eso despejó el camino completamente para que Carlos Sainz y Colin McRae se jugaran el título en el último rally del año.

Rally RAC

Y llegó la prueba final, el Rally RAC en Inglaterra. Sainz y McRae, empatados a 70 puntos en la clasificación y con los Toyota oficiales fuera de carrera, tendrían que darlo todo en una prueba de cuatro jornadas caracterizado por el complicado terreno de grava y la mala climatología británica. Tommi Mäkinen marcaba la pauta de una prueba que, más allá de saber quién la iba a ganar, centraba su interés en la lucha de los dos aspirantes al título.

Con los focos en esta pelea, Mäkinen abandonaba el rally en el séptimo tramo y tras finalizar la segunda jornada Carlos se hacía con el liderato con 39 segundos de diferencia con respecto a Colin McRae, quién sufrió un pinchazo y un golpe en la suspensión delantera derecha del Impreza. Pero el británico no cejó y, levantándose de cualquier situación adversa, enlazó varias victorias de tramo que le acercaron peligrosamente a Sainz en la tabla de tiempos.

El coche de Sainz parecía no tener la misma potencia que el de su rival y, tramo a tramo, McRae le fue recortando tiempo. Al finalizar el tercer día, McRae no solo pudo reducir toda la ventaja que le llevaba Sainz, si no que se colocó líder con una diferencia de 17 segundos sobre el español, llegando a sacar casi un segundo por kilómetro al español. En el cuarto y último día, pese a los intentos de Carlos por ganar tiempo, tan solo logró dos victorias de tramo frente a Colin McRae, quien se adjudicó la victoria con 36 segundos de diferencia con respecto a Carlos Sainz y se coronaba como Campeón y daba otro título Mundial de Rallys al Equipo Repsol.

https://www.youtube.com/watch?v=EVATFTXbPoE

Tras las desavenencias sufridas con el equipo en los dos años con Subaru, Sainz trató de volver a Toyota, la marca con la que logró dos títulos mundiales, pero debido a la sanción y exclusión por un año de la competición por la modificación no reglamentaria del turbo de los Celica oficiales, Carlos se vio sin equipo. La única opción fue arrancar de cero con Ford y el Escort Cosworth, un coche prometedor, pero que habría que evolucionar en 1996.

Deja una respuesta

Volver arriba