¿Qué son las luces de cruce y cuándo debemos usarlas?

¿Qué son las luces de cruce?

Las luces de cruce se localizan en la parte delantera de los distintos vehículos autorizados para circular por nuestras carreteras, y ofrecen un alcance que oscila entre los 50 y 75 metros. Su utilización es obligatoria de noche, entre la puesta y la salida del sol. También deben usarse durante el día al circular dentro de túneles, pasos inferiores y en situaciones en las que la visibilidad se puede ver reducida por lluvia, niebla, nieve, humo o polvo. Otro momento en el que deben ser utilizadas durante el día es al circular por carriles adicionales o zonas de obras. Según el reglamento, circular por un carril adicional obliga a activar las luces de cruce. La sanción por no hacerlo es una infracción grave y supone una multa de 200 €, la misma sanción que si se circula de noche con las luces apagadas. En este caso, si las luces no van encendidas por algún problema técnico y no puede ser solventado en el momento, el vehículo debe ser inmovilizado y transportado por una grúa hasta un taller.

En las motos, la norma cambia con respecto al resto de vehículos. Desde 2015, en España es obligatorio que las motos lleven siempre encendida la luz de cruce, tanto en ciudad como en carretera. El objetivo de esta norma es mejorar la visibilidad de las motocicletas y reducir los accidentes. Para facilitar su cumplimiento, las motos modernas no poseen un interruptor para apagar las luces y siempre están encendidas desde que el motor se pone en marcha.

¿Para qué sirven las luces de cruce o “cortas”?

La función principal de estas luces es alumbrar sin deslumbrar. Están diseñadas para proyectar la luz hacia abajo y alumbrar la zona más cercana a la parte delantera del vehículo. Su diseño proyecta la luz hacia abajo para no molestar o deslumbrar a los conductores de vehículos que se aproximan en sentido contrario. Por ello, su alcance hacia delante debe ser de unos 75 metros como máximo. Del mismo modo, la recomendación es que su altura esté regulada para que el alcance mínimo sea de 50 metros.

¿Es recomendable utilizar las luces de cruce durante el día?

Aunque de día solo son obligatorias en las motos, la DGT aconseja su uso durante el día en todo tipo de vehículos y, en especial, durante el invierno. Tan importante es ver cómo hacerse ver. Durante la circulación, no sólo es necesario que veamos a los que tenemos por delante, también es importante que los demás usuarios de la vía por la que circulamos nos vean, indistintamente del sentido en el que circulen. Este aspecto es muy importante para la seguridad vial, pues un vehículo que circula con las luces encendidas de día se divisa desde mucho más lejos que si lo hace con ellas apagadas.

Por este motivo, desde el año 2011 es obligatorio que todos los coches salgan de fábrica equipados con luces de visión diurna o DRL (del inglés: “Daytime Running Light”). Según la normativa europea, estas luces se deben encender automáticamente al activar el contacto del vehículo. De todos modos, aunque un coche equipe este tipo de luces, hay que seguir adaptándose a la normativa y utilizar las luces de cruce cuando la legislación así lo requiere.

Hay que señalar que en algunos países como Finlandia, Suecia, Noruega, Islandia o Dinamarca, entre otros, llevar las luces de cruce encendidas durante el día es obligatorio desde hace ya muchos años.

Según estudios realizados, un coche de color blanco con las luces de cruce encendidas durante el día se divisa 10 metros antes. En el caso de que sea plateado, se llega a ver 20 metros antes. Y si es de color negro, se puede ver hasta 110 metros antes. Otros estudios también confirman que si se circula de día con las luces encendidas, se reduce el riesgo de tener un accidente.

¿Cuál es la diferencia entre luces de cruce y luces de carretera?

Las luces de cruce o “cortas” pueden ser utilizadas en cualquier momento. Sin embargo, el uso de las luces de carretera o “largas” está restringido y deben ser utilizadas con la necesaria precaución para no perjudicar o deslumbrar a otros conductores.

La diferencia entre ambas está en el alcance y en la intensidad del haz de la luz. Las de cruce o “cortas” iluminan el camino sin deslumbrar y las de carretera alumbran a mayor distancia cuando las condiciones lo permiten. De este modo, las luces de carretera o “largas” ofrecen un mayor alcance para ver más lejos en tramos oscuros y sin tráfico, pero solo deben utilizarse cuando no haya otros vehículos cerca para evitar deslumbrar a sus conductores y que estos puedan realizar alguna maniobra perjudicial para la seguridad.

Otra diferencia es que el haz de las luces de cruce es asimétrico, con más alcance hacia el lado derecho, para iluminar más la zona del arcén de la carretera y no deslumbrar a los conductores que circulan en sentido contrario. En el caso de las luces de carretera, el haz es simétrico, con el mismo alcance hacia los dos lados.

¿Qué tecnología emplean los vehículos modernos en las luces?

En la actualidad las conocidas bombillas halógenas están en desuso y prácticamente no hay ningún vehículo moderno que las monte. En su lugar, los vehículos nuevos emplean luces de tipo LED o de xenón.

LED es el acrónimo en inglés de «Light Emitting Diode«, que se traduce al español como Diodo Emisor de Luz. Las luces LED son conocidas por su alta eficiencia energética, larga vida útil y versatilidad, lo que ha hecho que su uso esté muy extendido. Se ha llegado a decir que no se funden, pero es cierto que pueden fallar en alguna ocasión o se pueden romper. En este caso su sustitución es complicada, por no decir imposible. Si es de noche, habrá que detener el vehículo afectado y llevarlo en grúa a un taller especializado.

Por otro lado, una luz de xenón incluye un tipo de bombilla de descarga de gas que utiliza un arco eléctrico entre dos electrodos para crear una luz blanca, intensa y brillante, mucho más potente que una bombilla halógena tradicional. A diferencia de estas últimas, no tienen filamento, sino que un gas xenón ionizado (junto con vapor de mercurio y sales metálicas) es el que emite la luz cuando la electricidad pasa a través de él. Este tipo de luces incrementan considerablemente el precio de los vehículos que las incluyen, por lo que en muchos casos se ofrecen como equipamiento opcional. Al igual que ocurre con las luces LED, en el caso de que una luz de xenón falle, su arreglo o sustitución no es sencillo y debe ser realizado por un profesional cualificado, por lo que habrá que llevar el vehículo a un taller especializado.