MotoGP

¿Qué tiempo haría una MotoGP si frenara como un Fórmula 1?

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¿Por qué si en MotoGP la velocidad máxima es superior, en Fórmula 1 se logran mejores tiempos? Bienvenidos a la clase de Física amable de Box Repsol.

Montaje Dani Pedrosa rojo
¿Qué tiempo haría una MotoGP si frenara como un Fórmula 1?

Las motos alcanzan mayor velocidad, pero los coches son más rápidos. ¿Cómo puede ser? ¿Qué locura es esa? Si eres ingeniero de carreras, estas preguntas te parecerán una tontería y seguirás con tus cosas. Pero si eres un raso aficionado al motor y te acabamos de generar una duda existencial, pon atención.

Son varias las razones que explican esta aparente contradicción, pero muchas tienen que ver con el momento en el que piloto llega a la curva. Debemos tener en cuenta tres elementos para entender las diferencias de tiempo tan abismales entre un F1 y una MotoGP sobre un mismo circuito: la velocidad en el momento de atacar el giro, la distancia de frenada y el tiempo en el que estamos desacelerando para trazar la curva. En todos esos parámetros, el coche supera claramente a la moto. Juega un papel fundamental el hecho de que lleven cuatro ruedas (mucho más anchas) que apoyan toda su superficie en el asfalto, por no hablar del peso (casi cuatro veces más) o la aerodinámica.

Pongamos algunos ejemplos de tiempos, tomando como base el circuito de Montmeló. En la carrera de MotoGP disputada el pasado 17 de junio de 2018, la vuelta más rápida corrió a cargo de Jorge Lorenzo, con un tiempo de 1:40.021. Vayamos ahora a la Fórmula 1, al GP de España disputado en el mismo trazado solo un mes antes. Daniel Ricciardo dejó el cronómetro en 1:18.440, ¡casi 22 segundos más rápido! Si observamos la velocidad máxima, las motos llegaron a superar los 347 kilómetros por hora mientras que los coches no pasaron de los 330 Km/h.

Datos de la empresa Brembo, principal fabricante de frenos del Mundial en ambas disciplinas, permiten demostrar que lo de frenada es pura ciencia. En un test realizado en el circuito estadounidense de Austin quedó claro hasta qué punto las motos están por detrás frente a los coches en el momento de abordar las curvas. En cuanto al tiempo de frenada, pudo comprobarse que la moto llega incluso a multiplicar por cuatro los segundos necesarios para trazar la maniobra. En la curva 12, por ejemplo, los F1 emplean 1,4 segundos, por 5,9 de las motos. Si miramos la velocidad de entrada en la curva 19, los coches la inician a 169 km/h por 115 km/h de los pilotos de MotoGP. Más de lo mismo en la distancia de frenada. De regreso a la curva 12 de Austin, las motocicletas necesitan 300 metros para no pasarse de frenada e irse rectos, mientras que los autos solo emplean 128 metros. Estas son las estadísticas que nos explican por qué la vuelta rápida es siempre mejor sobre cuatro que sobre dos ruedas. Y tiene pinta de que seguirá siendo así. A no ser que las leyes de la física cambien.

Conocidos estos números, no es muy difícil imaginar qué tiempos podría llegar a marcar la moto de Marc Márquez o Dani Pedrosa en el imposible caso de que tuvieran las prestaciones de un Fórmula 1. Teniendo en cuenta que la velocidad máxima es entre un 5% y un 10% superior, las motos podrían arañarle a los coches hasta 10 segundos en función del circuito. Con lo distintos que son los trazados, resulta imposible concretar ese dato ficticio, pero es evidente que pulverizarían todos los registros de las cuatro ruedas. En resumen, las motos corren más pero los coches son más rápidos. Si hablamos de emoción, todos conocemos la respuesta… ¿verdad?

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Foto cabecera: Repsol

 

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