Vive tu moto

10 consejos para evitar que te roben la moto

7 minutos

En España se roban cerca de seis motos cada hora, por lo que los propietarios de un vehículo de este tipo nunca deben bajar la guardia. A continuación te damos unos consejos que harán más difícil que te roben la moto o que facilitarán su localización una vez sustraída.

10 consejos para evitar que te roben la moto

Los robos de motos siempre han existido y es un tema que está yendo en aumento de manera exponencial en los últimos años. Por ello, es interesante que sepamos cómo atar una moto para que no la roben y, en general, que llevemos a cabo ciertas pautas de conducta al dejarla estacionada fuera de espacios privados. De este modo, aunque no será totalmente imposible que nos la roben, sí que podremos ponerles las cosas más difíciles a los amigos de lo ajeno. Queda claro que los ladrones «profesionales» son capaces de sustraer una moto en apenas un par de minutos, por lo que es importante que les pongamos algunas trabas para dificultarles la operación.

Aunque dependiendo de la ciudad el índice de robo de motos puede ser mayor o menor, en España se roban más de 130 motos al día, lo que supone un total próximo a las 50 000 unidades al año. Si bien este dato da un poco de miedo, aún es peor saber que solo se recuperan un 10% de las sustraídas, lo que da una idea de lo difícil que es recobrar una moto una vez ha sido robada. Por otro lado, también es sabido que los modelos de moto más sustraídos suelen coincidir con los más vendidos, pero nunca hay que confiarse a pesar de que nuestra moto no esté incluida entre las más populares.

10 consejos para evitar que te roben la moto

1. Atención a los despistes

Nunca hay que dejar la moto con la llave puesta. Aunque la parada vaya a ser breve, siempre debemos quitar la llave de la cerradura de contacto y llevárnosla con nosotros. También deberemos accionar el bloqueo de la dirección. Es una operación que se lleva a cabo en apenas dos segundos e impide que se lleven la moto empujándola. Y si la dejamos con una marcha alta engranada, siempre ganaremos unos segundos que pueden ser de vital importancia.

2. Aparcarla en lugares frecuentados

No es aconsejable estacionarla en sitios solitarios por los que apenas pasa gente. Tampoco es conveniente esconderla, porque aunque así es más difícil que sea divisada, también permite que los ladrones trabajen con mayor tranquilidad en el caso de que la descubran. Y si va a dormir en la calle, mejor que sea en una zona bien iluminada.

3. Utilizar un candado para moto u otro tipo de elemento antirrobo que impida que gire una de las ruedas

Tampoco está de más poner uno en cada rueda si la moto va a estar estacionada mucho tiempo en un lugar o si se deja en un mismo sitio con frecuencia. Y si ya la podemos anclar con una cadena o un candado de arco a algún elemento fijo lo suficientemente robusto, mucho mejor. Al respecto, hay que tener en cuenta que en algunas ocasiones te pueden multar por dejar la moto “atada” a ciertos elementos de la vía pública. En algunas zonas habilitadas para el aparcamiento de motos existen pequeñas vallas o “bolardos” específicos para este fin. También se pueden “atar” dos motos entre sí para que sea más difícil moverlas.

4. Equipar una alarma

Además del bloqueo de dirección y de un candado o antirrobo, si una moto va a pasar mucho tiempo en la calle, nunca está de más equiparla con un sistema de alarma que pueda disuadir a los posibles ladrones. Existen alarmas sencillas que van incorporadas en el propio antirrobo o candado y que en la mayoría de los casos son suficientemente efectivas. Incluso a veces van acompañadas con un sistema Bluetooth que te envía un aviso al teléfono móvil.

5. Estacionar en un sitio seguro

Al estacionar una moto no está de más dejarla apartada de la calle por la que circulan los vehículos. En muchos casos se utilizan furgonetas para robarlas y cuanto más cerca estén del asfalto, más sencillo y rápido será para los ladrones el poder introducirlas a pulso en su interior. También es aconsejable variar el lugar en el que la dejamos. De este modo es más difícil que los ladrones la tengan “fichada”.

6. Aparcar en un garaje

Aunque la moto se aparque en el interior de un garaje comunitario, tampoco se deberá bajar la guardia. Muchos garajes de este tipo son muy tranquilos y aún más por las noches. Por tanto, bloquear la dirección y utilizar un candado o antirrobo es lo más adecuado. Existen argollas específicas para fijar a paredes, suelos o columnas que permiten asegurar las motos a ellas mediante cadenas o candados de arco. También hay unas cajas o estructuras acorazadas que son realmente seguras. Estas se fijan al suelo y en ellas se mete la rueda delantera para dejar la moto inmovilizada. Si va a estar estacionada varios días, tampoco está de más cubrir la moto con una funda para que sea menos llamativa.

7. Deja la moto donde no estorbe

Si la moto comparte plaza con un coche en un garaje comunitario, lo aconsejable es aparcarla al fondo de la plaza, entre el coche y la pared. De este modo el coche hace de barrera y es muy difícil sacarla de ahí sin haberlo movido antes.

8. Usa un sistema de localización

Muchas motos modernas cuentan con llave de proximidad o llave codificada y son prácticamente imposibles de poner en marcha si no se dispone de las citadas llaves. A pesar de ello, pueden ser cogidas en volandas e introducidas en un vehículo para transportarlas a algún lugar clandestino. En estos casos es vital el haber instalado con anterioridad un sistema localizador por GPS. Mediante su correspondiente aplicación, estos sistemas envían un aviso a nuestro teléfono móvil desde el momento que detectan algún movimiento indebido de la moto y, en el caso de que se la lleven, también permiten hacerle un seguimiento para su localización.

9. Aprovecha las cámaras de seguridad

En las ciudades y aparcamientos cada vez hay más cámaras de seguridad. Si estacionamos nuestra moto dentro del campo de acción de alguna de ellas, sabremos que estará vigilada en mayor o menor medida y así será menos atractiva para los posibles ladrones.

10. Reacciona rápido en caso de robo

En cuanto se detecte el robo de una moto, se debe contactar con la policía y poner la correspondiente denuncia. Cuanto menos tiempo pase, mayor probabilidad habrá de localizarla. La mayoría de las motos que se roban son desmontadas, tanto para vender sus piezas por separado, como para reparar otras motos accidentadas o averiadas. También se especula que una buena parte de ellas son sacadas de España con destino a otros países. Por otro lado, no es aconsejable dejar la documentación en la moto. En caso de que sea robada, es probable que haga falta para poner la denuncia o para entregarla a la compañía del seguro en el caso de que este tenga cobertura de robo.

Volver arriba

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Realizar un comentario implica la aceptación de nuestra política de privacidad